lunes, 13 de mayo de 2013

Soulmate

Una mirada fugaz entre la multitud, una sonrisa de "espera, dejo lo mejor para el final", un abrazo infinito, un roce de manos. Una charla sobre todo, desde lo más bonito, pasando por lo más gracioso, hasta lo más triste y confuso. Una respiración acompasada formando una melodía improvisada, unos besos que ya más de una vez nos han hecho olvidar el mundo.

-No quiero que te vayas. +¿Me quedo? -Quédate.

Unas únicas sábanas, dos personas. Mil susurros que se han quedado entre cuatro paredes, mil palabras que se pronunciaron en miradas, un calor de amor, un no sentir que hubiera nada más. Mis dedos paseando por toda tu espalda con toda la piel de gallina, infinitas miradas que quitaban la respiración, nuestras mentes completamente en blanco. Un suspiro y mi manía de observarte dormir, de tener los ojos de par en par mientras te acaricio el pelo, o te robo un beso inocente. Y tu dulzura reflejada en un inmenso abrazo contra ti mientras estás dormido, y en esa forma de cuidarme por encima de todo. Me robas la cordura, me has hecho tuya.

Te reclamo aquí, conmigo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario